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Si un niño o joven utiliza sus vacaciones para disfrutar, desligarse de la rutina escolar y descansar, cuando regrese a clases tendrá más energía, además de una fuerte disposición para aprender. Al desvincularnos momentáneamente de las responsabilidades académicas, el cerebro, al relajarse, recupera fuerzas. Esto promueve la concentración, la memoria y favorece un desempeño académico óptimo.
En nuestros momentos de ocio, al planificar actividades con amigos y familiares, se robustece la unidad, se cultivan las relaciones y nuestros corazones se llenan. En vez de utilizar los dispositivos electrónicos, las redes sociales, los videojuegos o las plataformas de transmisión como principales formas de entretenimiento, es esencial destinar tiempo al desarrollo personal, a través de nuevas vivencias y de lograr un descanso adecuado. La utilización de dispositivos tecnológicos genera un efecto opuesto: problemas en la concentración, agotamiento, ansiedad y problemas en el proceso de aprendizaje.
Salud Mental y Salud Emocional
Muchos alumnos sufren de estrés escolar, ya que la presión académica, las expectativas y los distintos grados de exigencia pueden generar ansiedad y agotamiento. Las vacaciones proporcionan un descanso imprescindible, ya que contribuyen a disminuir los niveles de tensión y fomentan la salud emocional.
En el tiempo de ocio, es posible realizar diversas actividades con amigos y familia; esto genera alegría, lo que ayuda a tener buen humor, potenciar la motivación y cultivar una perspectiva más optimista hacia el aprendizaje y la vida en general.
El descanso fomenta la creatividad
Es importante tener en cuenta que para que el cerebro adquiera y consolide los conocimientos, es esencial el reposo.
Los alumnos no solo obtienen conocimientos en el salón de clases: a lo largo del año académico, están asimilando información y datos, abordando desafíos intelectuales y solucionando problemas.
La época de vacaciones posibilita que niños y adolescentes se alejen de la rutina para enfocarse en descubrir experiencias distintas y novedosas. Viajar, disfrutar de la naturaleza, dedicarse a descansar o leer, son actividades que fomentan la imaginación y la creatividad. Cuando los alumnos liberan su mente de la presión del calendario, tienen la oportunidad de generar nuevas ideas, visiones y habilidades que, con el tiempo, potenciarán su aprendizaje.
¿Qué dice la neurociencia acerca del descanso en la etapa escolar?
La neurociencia indica que el reposo tiene un rol crucial en el desarrollo del cerebro. En los momentos de descanso y sueño, el cerebro se enfoca en procesar y consolidar los conocimientos obtenidos durante el día.
Además, el descanso apropiado fomenta la formación de nuevas conexiones neuronales, lo que potencia la memoria y la habilidad para concentrarse. Durante la etapa educativa, este proceso es aún más crucial, dado que el cerebro está en una fase de desarrollo intenso, lo que convierte el reposo en una necesidad que permite alcanzar un desempeño académico óptimo. Las vacaciones ofrecen un período esencial para la recuperación emocional y mental, lo que facilita que los estudiantes vuelvan al salón de clases con una mayor habilidad para enfrentar retos y asimilar nueva información.
En Thomas Jefferson School nos estamos preparando para recibir a nuestros queridos alumnos con los brazos abiertos. Conforme se aproxima el día de nuestro reencuentro, los animamos a que disfruten al máximo de estas últimas semanas de descanso, porque sabemos que la armonía entre el aprendizaje y el reposo ejerce un gran efecto positivo en el desarrollo y crecimiento de nuestros estudiantes.
¡Nos vemos pronto cargados de energía para lograr el éxito en este año académico 2025!
